"TE JODES"

Ante todo gracias a los que habeís enviado comentarios a la entrada sobre la crisis. Tanto aquí como en otros blogs que enlazaron el texto.
De todos ellos se lleva la palma el de "entrecomics" que empieza "Joan, TE JODES". Y continúa hablando de "siniestras maquinaciones" (de los editores), "precios de extorsión" y apocalípsis...
Tampoco está mal la acusación de "caradura" de un autor que firma Enric.
Pero dejando aparte a los amigos, muchos dan a entender que mi visión es pesimista o que Glénat está en crisis, o sea como si me estuviera quejando de algo.
Y no era eso lo que pretendía.
Me habré explicado malamente.
Lo que trataba de apuntar es que la crisis de la que estamos oyendo hablar todo el dia, no es ajena a la historieta. Y sin embargo nadie hablaba de ella, como si la cosa no fuera con nosotros.
Yo no me quejaba de nada referido a Glénat en concreto.
Ni pretendía ser apocalíptico.
Ni estoy deprimido. (Eso si, como mañana no ganemos al Bayern otro gallo cantará...)
Ni, por supuesto, Glénat se hunde.
Hemos bajado de ventas. Como todos. Incluso un poco más que las otras editoriales. ¿Porqué?
Pues porque preveyendo la tormenta bajamos el número de novedades a la mitad durante el primer trimestre.
Si esta decisión ha sido acertada o no lo veremos dentro de unos meses. Fue mi decisión y yo la comparto...
Es decir, yo hablaba de la crisis que se genera en un mundo con un patrimonio global (acciones más propiedades inmobiliarias) de 250 billones, en el que los fondos propios de toda la banca mundial es de tan solo 4 billones y la estimación del dinero "escondido" en los paraísos fiscales alcanza los 10 billones.
Una crisis que esta vez se propaga más veloz porque es mediática.
Y cuya solución quizás es tan simple como recuperar la confianza.
Y eso incluye, por supuesto, al mundo de los tebeos.
Por la parte que me toca Glénat vuelve al ritmo normal de novedades a partir de este mes de abril. Y puedo asegurar que estamos trabajando en nuevos formatos, precios y lo que haga falta para sostener la facturación, en la pequeña parte que nos corresponda.
Somos conscientes de que en estos momentos se necesita un mayor esfuerzo en promoción y en pensar fórmulas creativas que ayuden especialmente a las librerías especializadas.
Estamos en ello.
Y sobretodo en asegurar que durante el post-saló, en verano, se mantenga el nivel de novedades y acciones promocionales.
En cuanto a algunas memeces que he tenido que leer, solo puedo decir que ni los tebeos son más caros que los libros o los DVD, ni la "saturación" del mercado es distinta que la del libro ni se tima a los autores. Ni en Glénat ni en ninguna editorial, que yo sepa. En Glénat pagamos cada año cerca de un millón de euros en derechos de autor. Y estoy orgulloso de que una parte importante se pague a autores españoles.
Y, los derechos de autor, aquí y en Pernambuco se pagan sólo en dos conceptos. Anticipos para crear una obra y liquidaciones según ventas.
Puedo asegurar que en el primer concepto, el de "anticipos", es en el que Ediciones Glénat ha perdido más dinero en sus 16 años de existencia.
Y que conste que los hemos perdido a gusto.
Sarna con gusto no pica...
O eso dicen.

Post Data: recomiendo la lectura del libro de Joan Majó "No m'ho crec" ("No me lo creo") no solo para entender como se ha producido la crisis sino para comprender donde está el verdadero problema, especialmente en Cataluña y España. (Creo que el libro todavía no ha sido editado en castellano).