martes, 16 de noviembre de 2010

SET DE CÒMIC EN LLEIDA

En este fin de semana de locos, con salones del manga en Murcia y Granada y la tercera edición de Set de Còmic en Lleida, resulta difícil recoger información fidedigna de cada evento.
Yo estuve en Granada y aparte de una magistral charla de Marc Bernabé y la presencia de las autoras de la línea Gai-Jin (con perdón de Kenny-cumpleaños-feliz), el salón no dió para más, pulpada y Batán, al margen...
De Murcia sólo he oído buenos comentarios.
Y de Lleida leí no-se-qué, en el periódico, de una asociación de editores de comics que pretende tener voz propia en el gremio.
Y visualizé a Berenguer y Camarasa, pimplados o de resaca, con la enésima idea que no irá a ninguna parte.
También me han contado la charla de Carles Santamaría sobre ese Museo del Cómic ( y lo que haga falta) que no tendrá presupuesto para comprar tebeos, ni originales, pero que si lo tendrá para tener tres directores (tipo tripartito), incluyendo a uno de Madrid. Lo que significa pagar desplazamientos y hoteles.
Francamente me parece una verguenza que para tener contentos a los ilustradores haya que aceptar sus estupideces. Primero fué la propuesta de Marta Sierra y ahora la de Felipe Hernández Cava.
En su momento ya dije que estaba en contra de que el Museo del Còmic fuera también de la Ilustración. Ahora estoy más en contra que nunca.
El Museo del Còmic debe tener un director. Y quien se ha ganado ese puesto es Carles Santamaría.
Y si los editores de comic quieren montar una especie de lobby que empiecen por apoyar incondicionalmente a Santamaria.
Ni triunviratos ni hostias.
Pero no harán nada.
Como siempre.
Y ¿qué se apuestan a que en el próximo Salón del Còmic de Barcelona el jurado para el Gran Premio del Saló seguirá siendo el Comité Ejecutivo de Ficomic?
Y Carles Santamaría tampoco moverá un dedo para cambiarlo.
Y así nos vá...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Si noi, sembla que no apunt gaire bé.

max dijo...

O sigui, que a qui cal tenir contents és als editors, als autors i les seves "estupideses" que els bombin.
Més clar, aigua.

max dijo...

traducción: O sea, que a los que hay que tener contentos es a los editores, a los autores y sus "estupideces" que los zurzan. Más claro, agua.

Joan Navarro dijo...

En ningún momento me sentía editor cuando escribí este post. Ni pretendía dar a entender que había que tener contentos a los editores...
Yo defiendo un Museo del Còmic. Cuya urgencia me parece casi dramática. Y obviamente un centro dedicado al còmic tendrá parcelas obligadas tanto de ilustración como de cultura popular: cromos, folletines, dibujos animados, etc.
Y lo defiendo como quien quiera defender un Museo de la Ilustración. Tan necesario como el del Còmic.
Y que también estará, en ocasiones, vinculado con la historieta.
Pero una cosa es la historieta y otra la ilustración.
Y el proyecto impulsado por Ficomic, con el enorme trabajo de Carles Santamaría al frente, es un proyecto del Còmic.
Y eso es lo que defiendo.
No entiendo que hayamos llegado hasta aquí para sentirnos tan acomplejados que no creamos que es viable un Museo del Còmic sin añadidos.
Y no des a entender que no estoy del lado de los autores. Estoy defendiendo a los autores de tebeos. Especialmente a todos los que trabajaron toda su vida en unas condiciones lamentables y que permanecen olvidados, a pesar de habernos alegrado la vida.

maginelmago dijo...

Quien mucho abarca, poco aprieta.
¿No existía antes el Saló el Comic i la Il·lustració de Barcelona?

En un panorama de recortes presupuestarios (en políticas sociales, etc.), ¿sigue siendo factible un Museu del Comic? (supongo que no será un Museu del Tebeo o de la Historieta, que son palabras que demasiada gente no puede pronunciar: se mueren de vergüenza antes)

Edu dijo...

¿Nuestro amigo el mago insinua que en un panorama de crisis se debe rectortar en cultura? Yo creo que no, la base de cualquier sociedad es la enseñanza y la cultura. Precisamente, en esos païses en dónde existen actualmente ciertas represiones tamizadas por una falsa democracia (léase China) o militarizados por sus líderes (léase Birmania y Corea del Norte), convirtiéndolos en los últimos reductos dictatoriales del siglo XXI, se prohibe sistemáticamente a sus ciudadanos cualquier manifestación cultural. Objetivo: si quitas la cultura al pueblo no tiene armas con las que pensar. Esto lo hacía Mao Tze Tung en sus buenos tiempos.
¿Porque no debería ser sostenible un museo del cómic si tenemos filmotecas? Es tan lícito querer conservar una obra fílmica como un tebeo (no entiendo lo de avergonzarse...)
Obviamente en los tiempos que corren un Museo del Cómic debe ser "sostenible", pero no por eso se debe aparcar hasta la eternidad. Lo que tampoco hay que consentir es que "algunos" (como en todas partes) chupen del bote por las buenas.