REFLEXIÓN SOBRE LOS ANTICIPOS DE DERECHOS DE AUTOR

El libro digital ha levantado en armas a los autores en defensa de sus derechos de autor. Especialmente en Francia.
No sólo tienen todo el derecho sino que además tienen razón.
Los contratos con las editoriales no valen para esta posible "nueva" edición. Incluso si incluyen aquella clausula tan cómica de "para todos los medios que se inventen en el futuro"...
Y con ello surge el primer enredo. ¿Qué estamos negociando los editores?. Creo que tan sólo un idea. Una idea confusa, amenazadora de nuestra propia actividad y en la que nadie ofrece un duro. Es decir que esto ha empezado muy mal. Porque en su inicio el juego era que nos ofrecían adquirir todo nuestro fondo a cambio de nada, sólo de una hipótesis de futuro. Entonces ¿Cómo podemos negociar los editores con los autores? La base de la negociación sería compartir cero euros.
Nunca en mi vida de editor me he permitido ceder a un tercero la obra de un autor a cambio de nada. Y mucho menos todo nuestro fondo.
Y, por supuesto, por más que hablemos, si luego viene el autor y no está de acuerdo con la propuesta no hay nada que negociar.
Del otro lado, encontramos a unos visionarios que están invirtiendo una pasta en desarrollar una tecnología y, el propio negocio, que nadie sabe si va a ser negocio. Y su posición es que ellos son los que están arriesgando y nos plantean compartir ese riesgo.
Como editor me siento atrapado entre la espada y la pared.
Y además no puedo dejar de pensar que estoy ayudando a cavar mi propia tumba, a cambio de nada y con el riesgo de algún malentendido con los autores.
Y todo esto nos cae encima en plena bajada de ventas. Ventas que en muchos casos me han hecho pensar que pronto no será podible seguir manteniendo el mismo concepto de los anticipos de derechos de autor que tenemos hoy.
Cada dia tenemos más libros que venden por debajo de los 1000 ejemplares, que dan perdidas y de los cuales hemos anticipado la tirada completa al autor.
Excluyo de estos planteamientos las producciones encargadas por la editorial, o aceptadas por la editorial.
Me refiero sobretodo a las obras que publicamos y que han sido creadas anteriormente. Entran ahí desde "Esther" a "Jan Europa" o "Frank Cappa", por ejemplo. Incluso los álbumes franceses y los mangas.
Es decir que creo que la acumulación de anticipos no recuperados con las ventas ha acabado siendo un lastre casi imposible de soportar.
Si compro un álbum a un editor extranjero ¿porqué tengo que anticiparle los derechos de 1000 o 1500 ejemplares, si la venta puede ser de 700?.
Y eso vale tambien para cuando nos compran a nosotros.
¿Porque hay que hacer liquidaciones al cabo de un año si las ventas se saben a los tres o cuatro meses?
Creo que sería mucho más justo y razonable pagar a los tres meses, por ejemplo, sobre la base de la venta real. Y si es necesario dar garantías de cobro.
Si una obra no se vende las liquidaciones posteriores son de pena, cuando no negativas, pero si se vende se pueden ir pagando trimestralmente y no anualmente como ahora. Nuestros sistemas informáticos lo permiten perfectamente y sería mejor para la tesorería editorial.
Ahora se producen situaciones sin sentido como que a un autor que le has publicado tres álbumes le tienes que pagar 100 euros del primero pero te quedan por recuperar 2000 de los otros dos.
Igualmente propongo revisar el royaltie. Debería ser escalado. A más ventas más royaltie. Porque el beneficio de la editorial se multiplica con las ventas.
O las comisiones por ventas internacionales.
Cuando uno se pasa el dia mirando números se lo replantea todo.
Porque ya hemos reducido tiradas, costes de producción, gastos generales y plantilla, para adecuarnos a la realidad que dicta el mercado.