ADIOS A SHUEISHA (32): LA TRACA FINAL DE MI PRIMER VIAJE A JAPÓN, FUÉ EL PASEO EN MOTO QUE ME OBSEQUIÓ PIERRE-ALAIN, EN MI ÚLTIMA NOCHE EN TOKYO

 

 

Me recoge Pierre-Alain, en nuestro habitual meeting-point y me monto en su moto para disfrutar del maravilloso espectáculo de luces y bullicio que es el Tokyo nocturno.

La noche empieza en el centro mismo de Sinjuku, donde vamos a una actuación de una amigo grafista de Pierre, que toca la batería en un grupo. El local en el que tocan es un 5º piso... Hacen una mezcla de jazz-rock y música brasileña.

Charlamos con un escritor americano de S.F., al que conocía Pierre y, las únicas japonesas que nos dirigen la palabra son horribles...

Recorremos después otro pedazo de Tokyo, para acabar cenando en un thailandés, el recurso más socorrido en Japón, cuando no quieres más sushi...

Trás la cena, otro recorrido en moto, hasta una gigantesca librería que abre las 24 horas.

Y, nuestro último paseo nos conduce a un bar brasileño, a beber caipiriñas, como despedida, no sin antes jugar en un espantoso futbolín japonés...