EL SALÓN DEL GATOT

Hoy ha sido el Salón iniciático para mi hijo. Le he mentalizado antes de salir de casa entonando "Saló del Còmic"con mi máxima capacidad de seducción. Y ha venido tan contento.

Trás la visita al stand de Glénat, hemos iniciado una vuelta por el Salón.

Lo primero que nos encontramos es a un idiota vestido de zombie al que no se le ocurre nada mejor que acercarse al niño en plan película de terror. Mi hijo ha salido corriendo... 

Después hemos ido al rincón "Star Wars" donde le he explicado que unos monstruos que le han atemorizado eran simplementemente monstruos... y entonces una señora mayor se nos acerca y nos dice que la princesa Leia, o quien fuera, es su sobrina y que si queremos que el niño se haga una foto con ella, nos lo arregla... Digo que sí por no disgustar a la  tieta y la princesa de marras coge una espada de esas absurdas espadas de luz sólo aptas para los fanáticos de la serie, y una vez más mi hijo sale corriendo... creyendeo que le iban a dar...

Trato de arreglarlo al ver un hortera vestido de Superman y acercarme a él anunciándolo con falsa pero entonada íntención. Y el puto Superman ni se molesta en contestarnos, se da media vuelta y se va a seguir no yendo a ninguna parte y sobretodo, no haciendo el menor esfuerzo que pudiera justificar que alguien le pague por ser un ectoplasma.

Y llegamos a la exposición de gatos, veo a figura de Blacksad y allí que nos vamos. Y se pone tenso ante su magnitud. Y mientras no hay quien le convenza para que se acerque, no cesa el desfile de ùn público de todas las edades y aspectos, que quiere fotografiarse con el gatot. Aunque el prototipo es la típica pareja joven de la que intuyes el infierno en el que probablemente se va a convertir su convivencia.

Y, cuando por fín mi hijo se ha atrevido a acercarse y a tocar la figura que mi chica ha bautizado como "gatot", he pensado que si la figura se levanta en ese momento, me rindo. Renuncio a tratar de manipular a mi propio hijo para que le gusten los tebeos...