Recominendo regalar.
No hay mejor sensación que cuando tienes la absoluta certeza de acertar con un regalo. Especialmente si se trata de un regalo de tebeos, a alguien que los ama como tú mismo. Todo lo contrario que lo que suele ocurrir con los absurdos regalos familiares de navidad. Alguno de los cuales va directamente al container... Nunca he entendido porqué a nadie se le ha ocurrido algo tan sencillo como ir a Continuarà y pedirle a Albert que escoja un regalo para mí. Incluso en el caso de no acertar del todo será infinitamente más satisfactorio que, por ejemplo, un pez que canta y "baila" canciones de Elvis o un perfume de dudoso glamour.
Supongo que visto desde el otro bando, muchos de mis regalos "Continuarà" tampoco habrán causado mucho entusiasmo en mis familiares. Además nos gastamos una pasta absurda para regalos absurdos, en lugar de, por ejemplo, gastarla en buenos vinos o en una sobredosis de gambas de Palamós.
Todo esto viene a cuento porque hace unos dias me dí el gustazo de regalarle a un viejo amigo unos originales que le hacían una enorme ilusión. Se los envié a su casa y de vuelta recibí los originales de un cuaderno entero de "El Jinete Fantasma" de Ambrós. Era el inesperado regalo que recibía en agradecimiento por el mio.
Y me encantó.
Sobretodo por ser un regalo. También por inesperado.
Y por significarme la alegría que le había supuesto el mío.
Todos contentos.
Y... gratis.
Pero no se confundan con la idea del trueque.
O por el intercambio de esto por lo otro.
Piensen en el valor añadido de la sorpresa inesperada.
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